El Servicio Meteorológico Nacional destacó que las áreas más afectadas son NOA y NEA, en donde hace dos años que la falta de agua viene impactando en los niveles productivos.
Print Friendly, PDF & Email20.09.2022
Infocampo
INFOCAMPO
Con la siembra de soja y maíz calentando motores, los efectos de la sequía se extienden por todo el país y afectan a 10 millones de hectáreas, de acuerdo a un relevamiento del Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
Si bien las últimas lluvias trajeron alivio para los productores, los efectos de la falta de precipitaciones en el último verano siguen en escena.
Paisajes multifuncionales: insectos benéficos, los aliados para cultivar la “agricultura regenerativa”
La biodiversidad y la captura de carbono están entre los aspectos priorizados por la compañías que apuestan a un fortalecimiento de los agronegocios.
De esta manera, la sequía moderada se expandió en la región núcleo hacia el norte de Buenos Aires y sur de Entre Ríos. En el norte argentino, esta situación también impactó en el este de Formosa.
Las lluvias dispares que se registran en Argentina no alcanzaron para revertir este escenario. En agosto, el SMN señaló que las precipitaciones más importantes se registraron en Mesopotamia, norte de Patagonia y región central del país.
En la zona núcleo, se registró nuevamente un mes en rojo, situación que se extendió hacia el resto del territorio bonaerense.
HUMEDAD EN LOS SUELOS
“Los índices de humedad muestran condiciones deficitarias para gran parte de los suelos del centro y oeste del país”, advirtieron. Si bien hubo una mejora en el Litoral, explicaron que los impactos vinculados a la sequía del verano pasado siguen vigentes. En esta instancia, se registran bajos valores de humedad en Córdoba, sur de Santa Fe y norte de Buenos Aires.
MIRA: El clima eclipsa al girasol: la sequía frenó la siembra y hay lotes con daños por las heladas
Los impactos varían de acuerdo a la región. En Formosa y Corrientes, hubo caídas en la producción de cultivos y forrajes, además de una merma en los indicadores ganaderos.
En Santa Fe, el trigo acusó el golpe. “El incremento de incendios en el Delta del Paraná generó la quema de grandes superficies”, afirmaron. En San Luis, la falta de agua generó un incremento en los incendios.
Los efectos de la falta de agua se perciben sobre todo en NEA y NOA, con una duración que de acuerdo al SMN lleva contabilizada 26 y 22 meses, respectivamente. En Cuyo registra unos 18 meses y en la zona centro del país, 10 meses.